
2 Guns, basada en la novela gráfica de Steven Grant, se construye básicamente por la acción de dos personajes. Se trata de dos agentes infiltrados interpretados por Mark Wahlberg y Denzel Washington. Su desconfianza mutua genera el humor necesario que sirva de contrapeso al mero hecho de mostrar momentos cargados de adrenalina.
Sin duda, al filme de Baltasar Kormákur le sobran disparos y testosterona. Aunque dispara buenas dosis de humor, las bromas no llegan a ser lo suficientemente ingeniosas como para distraernos de una historia un tanto exagerada. Si no fuera por el carisma de los actores sería muy fácil perder el interés.
La falta de equilibrio que hay entre las escenas más explosivas del guión y el desarrollo dramático de los personajes hace que el resultado sea bastante soso. En fin, una película de colegas al más puro y genuino estilo americano que nos viene a recordar la existencia de un género muy explotado en Hollywood. Por momentos, el guión pretende tener un estilo western, pero a lo moderno, y desafortunadamente se queda en un intento.
¿Estamos ante el nacimiento de una nueva pareja cinematográfica? Ya solo por ver a Wahlberg-Washington juntos merecería la pena darles otra oportunidad. Porque en ‘2 Guns’ lo que hay es mucho ruido y pocas nueces.