El director noruego Morten Tyldum (‘Headhunters’) dirige con total maestría ‘The Imitation Game‘, basada en el libro Alan Turing: The Enigma del escritor británico Andrew Hodges, pionero del movimiento de liberación gay de los años 70. Se trata de un retrato dramatizado de la vida y obra de uno de los héroes más extraordinarios y desconocidos de Gran Bretaña, el matemático Alan Turing, al que se le conoce por haber descifrado el código de la inquebrantable máquina Enigma de los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.

Impulsado por los hermanos Weinstein, ‘padrinos’ de gran parte del cine independiente estadounidense de las últimas dos décadas, ‘The Imitation Game’ es un ejercicio cinematográfico intenso e inolvidable sobre un genio que ayudó a salvar miles de vidas, pero que paradójicamente sufrió una cruel condena por ser homosexual, lo que le llevaría al suicidio con tan solo 41 años.

Se trata de una de esas películas centradas en los personajes que cautiva por la densidad de su relato y por su significado histórico. Resulta brillante como de un biopic aparentemente convencional puede surgir un extraordinario thriller. El guión destila humor y ligereza en las ocasiones que se necesita realmente. Respecto al modo en que se rodó la película hay una sensación de maestría artística. La historia está estructurada en tres tiempos fílmicos presentados en orden inverso cronológicamente hablando: los últimos años de la vida de Turing (1912-1954), la Segunda Guerra Mundial y la adolescencia del científico en un internado en los años 20.

Uno de los mejores aciertos del filme fue elegir al actor inglés Benedict Cumberbatch para dar vida a una personalidad única y asimétrica como la de Turing. Conocido por sus trabajos en ‘El quinto poder’, ‘Star Treck: en la oscuridad’ y la serie televisiva ‘Sherlock’, Cumberbatch consigue aquí el mejor papel de su vida y su talento brilla sobremanera. Resulta asombroso como logra recrear el mundo del matemático y hacernos partícipe de su propio razonamiento y excentricidad. Benedict tiene esa mezcla de sensibilidad y fuerza que le permite llegar a la vida interna del personaje. Por eso consigue retratar a un genio y resultar creíble. Junto a él un elenco de actores del cine británico, como Keira Knightley, Matthew Goode y Mark Strong, que ayuda a realzar la brillantez de la interpretación en su conjunto.

Al magnífico trabajo actoral hay que sumarle un extraordinario montaje, que permite que la película avance con el ritmo y fluidez adecuado. La dirección artística intensifica el momento histórico e imprime a la historia el caracter convulso de la época. También la fotografía es muy respetuosa con la atmósfera de la historia. Su manera de iluminar es hermosa, elegante y pronunciada.

‘The Imitation Game’ (Descifrando Enigma) está llamada a formar parte del mejor cine de los últimos tiempos y atraerá todos los premios cinematográficos por su particular magnetismo. Un tributo al hecho de ser diferente y a lo fundamental que es tener en la sociedad a gente que piensa diferente sin seguir la norma. Alan Turing se enfrentó a una gran injusticia, pero nunca comprometió sus ideales. Y el mundo es mejor por su valentía. La tragedia de su vida no solo es que acabara tan pronto, sino que fuera perseguido en una época de intolerancia por su sexualidad.

«A veces la película que nadie imagina capaz de nada es la que hace cosas que nadie imagina«. Esto es ‘The Imitation Game’, cine que apasiona y que dignifica el séptimo arte como espectáculo de masas.

1 comment

  1. A mí me gustó mucho. Soy muy fan de Cumberbacht, de la historia que cuenta y del personaje en particular. Era fácil que me encantara. Personalmente me gustó mucho también Keira. Creo que no esperaba que me gustara tanto.
    Para mí la cinta es de lo mejor del año sin duda, aunque creo que no se llevará una mierda en los Oscar.
    Gran crítica!!

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