Jafar Panahi es uno de los directores de cine iraní más conocidos en la actualidad. Su talento ha sido internacionalmente reconocido en muchas ocasiones. Ganador en 1995 de la Cámara de Oro en Cannes por ‘El globo blanco’; León de Oro en Venecia en el año 2000 por su película ‘El círculo‘; y Oso de Oro en la Berlinale por ‘Taxi Teherán’ en 2015.

Panahi tiene una trayectoria cinematográfica que ha situado a Irán en el mapa y, sin embargo, unas convicciones políticas y sociales que le han situado en el punto de mira del gobierno de su país. Películas como la cruda ‘El círculo’ y la comedia crítica ‘Offside‘ fueron prohibidas por el Gobierno de la República Islámica al tratar de reflejar la situación de las mujeres en Irán. Pero lo peor estaba por llegar.

En las protestas electorales de Irán en 2009, un teléfono móvil graba la muerte de un disparo de la estudiante de filosofía Neda Agha-Soltan. Las fuerzas paramilitares Basij, quienes estaban a cargo de controlar a los protestantes, son las responsables de la muerte. El video rápidamente se vuelve viral y las protestas de los iraníes contra el presunto fraude electoral y el apoyo de los ciudadanos a los candidatos de la oposición, Mir Hosein Musaví y Mehdí Karrubí, acaparan minutos en los informativos de todo el mundo para fastidio de la República Islámica. Estábamos frente a la Revolución Verde Iraní, la semilla de La Primavera Árabe o el empoderamiento popular árabe a favor de la democracia y los derechos sociales.

Jafar Panahi's filmography
Filmografía de Jafar Panahi

La primera detención de Jafar Panahi se produjo precisamente mientras asistía al entierro en Teherán de Neda Agha-Soltan junto a un numeroso grupo de gente. Aunque más tarde sería liberado, se le retiró el pasaporte y se le prohibió abandonar el país. El 1 de Marzo de 2010 volvió a ser detenido junto a su mujer, hija y un grupo de amigos. Más tarde, un representante del gobierno iraní manifestó que Panahi estaba rodando una película contra el régimen, algo que la mujer de Panahi desmintió.

Tras 88 días entre rejas, y gracias al apoyo de organizaciones de derechos humanos y numerosos actores y directores de fama internacional, una declarada huelga de hambre y el pago de una cuantiosa fianza, sale en libertad. El 20 de diciembre de 2010 fue condenado a 6 años de cárcel y 20 de inhabilitación para hacer cine, viajar al extranjero o conceder entrevistas.

Pese a que Panahi apeló la sentencia, un tribunal de Teherán confirmó la pena. El delito que se le imputa es «actuar contra la seguridad nacional y hacer propaganda contra el estado». Revelándose a esta prohibición de hacer cine, el ingenioso Panahi ha conseguido crear, desde la clandestinidad, trabajos como ‘Esto no es una película’ y ‘Taxi Teherán‘, Oso de Oro en Berlín en 2015. Trabajos que son reflejo de su actitud de insumisión ante la sinrazón y su lucha incansable por la creación cinematográfica, la libertad de expresión y los derechos ciudadanos. Todo un ejemplo para el mundo del cine.

1 comment

  1. Muy importante no sólo para el cine en sí, sino para dar a conocer la situación de estos países en donde no se cumplen un mínimo de respeto y derechos fundamentales. Ojalá, estos directores sigan contribuyendo con su talento en sensacionales películas.

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