
Última semana antes de la gran noche de los Oscars. Las últimas quinielas son rellenadas y las casas de apuestas promocionan con más insistencia que nunca sus combinaciones para seducir a aquellos que quieran probar suerte con el «big day» del séptimo arte. Una vez analizadas por Macguffin007 las ternas de reparto, tanto femenina como masculina, el siguiente paso es adentrarse en las categorías principales, las cuales han visto una evolución distinta en cada una a medida que avanzaba la temporada. El desarrollo de la carrera al Oscar en la categoría de Mejor Actriz ha sufrido solo un cambio drástico que alternó el liderato de la terna, y no fue otra cosa que el estreno de ‘La La Land‘.
Natalie Portman era el nombre que iba a ser bañado en oro antes de Navidad, hasta que apareció Emma Stone y reventó la carrera. No solo ha ganado los premios más importantes de la temporada (Globo de Oro, SAG y BAFTA), sino que ha subido a un altar por méritos propios donde se le venera como la actriz del momento. A sus 28 años, Emma Stone ha experimentado una carrera meteórica desde sus inicios en 2007. Ya no es aquella cara bonita de ‘Bienvenidos a Zombieland’ o ‘Criadas y Señoras’, ahora es un monumento de la actuación cuya ficha la firman nombres como Woody Allen o Alejandro González-Iñárritu.
‘Emsies‘, como la llama cariñosamente Ryan Gosling, tiene muy cerca ganar su primer Oscar en su segunda nominación en dos años, y realmente es lo que le queda, porque es guapa, tiene talento y ha dado un personaje inolvidable. Lo único que juega en su contra es que La Academia crea que su proyección le dará más oportunidades de ganar y se lo guarden para un futuro.
Venecia y Toronto pusieron en septiembre a Natalie Portman en velocidad crucero hacia el Oscar. Su solemne retrato de la dama más icónica de América (en un tiempo donde precisamente en América se extrañan este tipo de referentes femeninos) encandiló a la crítica. Portman es una de las pocas privilegiadas que ha ganado los cuatro principales premios de una temporada (Globo, SAG, BAFTA y Oscar, por ‘Cisne Negro’ en 2010), sin embargo, su sprint final este año ha sido inferior al de otras como Emma Stone o Isabelle Huppert, que le han adelantado de manera impotente. La actriz de origen israelí tiene a su favor que su personaje dignifica la historia americana y eso siempre gusta a La Academia (el ‘Lincoln’ de Daniel Day-Lewis puede ser un ejemplo), pero en contra tiene que perdió el Globo de Oro en favor de Isabelle Huppert y que no es la que mejor situada llega al final de la carrera.

Isabelle Huppert está de moda. La actriz parisina ha logrado lo que parecía imposible después de 46 años de carrera cinematográfica: conseguir una nominación al Oscar. Su papel en ‘Elle‘, un regalo de un confesado admirador de su trabajo como es Paul Verhoeven, ha levantado los elogios de propios y extraños. Su victoria en los Globos de Oro y que haya sido la que más premios de la crítica ha ganado esta temporada (15) revelan que su presencia es una seria amenaza para Emma Stone más allá de una grata alegría para los amantes del cine. Que La Academia sepa diferenciar el fenómeno ‘La La Land’ de la mejor actuación de la categoría es la esperanza de Huppert, ya que en contra lo único que tiene se llama Emma Stone.
Un sinónimo de nominación siempre será Meryl Streep. Cuando Meryl estrena película, lo lógico es que se meta en la terna de nominadas en enero, y este año no ha sido menos. Su actuación como una soprano con el único talento de romper tímpanos en ‘Florence Foster Jenkins‘ le ha sido suficiente para arrebatarle el puesto a la maravillosa Amy Adams de ‘La Llegada‘, en uno de los mayores «snubs» que se recuerdan en La Academia. Con 20 nominaciones y tres Oscars, es incontestable que su carrera es una de las mejores de la historia y que es una leyenda viva, pero al igual que le pasase en su última nominación (‘Into The Woods’), su presencia es más un lujo con el que la ganadora puede presumir y la enésima reverencia ante la reina de La Academia. Su candidatura es presencial, no competitiva, pero a ella le da igual, pues será mencionada, fotografiada y querida como la que más, algo que ya es costumbre.
En todos los quintetos siempre hay una novata, y este año esa es Ruth Negga. El drama racial que protagoniza junto a Joel Edgerton, ‘Loving‘, es el billete que le ha dado acceso a la terna de nominadas, acción bastante inteligente, pues son este tipo de papeles los que La Academia suele reconocer, como fue el caso de Lupita Nyong’o en ‘12 Años de Esclavitud‘, con el que incluso ganó. Negga tiene 35 años y es nueva en una temporada de premios, tiene imposible la victoria por competencia, por ser su primera vez y porque su película no se ha metido en ninguna otra categoría, pero la oportunidad de cincelar mejor su carrera la tiene en su mano. El futuro dirá si aprovechará esta invitación o si simplemente vivirá de nostalgia como otras muchas actrices.
A priori, la victoria de Emma Stone es la apuesta a caballo ganador, y decisiones sorpresa se vienen dando muy poco en los últimos años en los Oscars. No obstante, descartar a Isabelle Huppert es un error descabellado, y dar por muerta a Natalie Portman tampoco es algo recomendable. Entre estas tres actrices anda el juego, pues Meryl Streep, a pesar de ser Meryl Streep, está de guardia en lo que ya es su recreo, y Negga es la chica nueva del instituto. El domingo que viene se saciarán nuestras dudas.