El Festival de cine de Las Palmas 2017  ya toca a su fin y lo hace con muy buenas películas. El jueves vino marcado por lo último del controvertido cineasta Lav Diaz, el viernes por la fantástica película búlgara ‘Un minuto de gloria’, el thriller japonés ‘Harmonium’ y por el drama indie ‘Golden Exists’, última película a concurso. Una recta final del festival muy estimulante y que nos ha deparado gratas sorpresas.

También el viernes se celebró la tradicional La noche más freak, cine gamberro que se proyecta todos los años y que en esta ocasión tenía como plato fuerte el thriller indio de psicokillers ‘Psycho Raman’.

The woman who left (Filipinas). Dir. Lav Diaz

The woman who left’ cuenta la historia de venganza de Horacia Somorostro (Charo Santos-Concio), que tras ser encarcelada por un crimen que no había cometido es liberada y, camino de su venganza, acaba convirtiéndose en una heroína de los más desfavorecidos. En mitad de la soledad de la noche se transforma en un ser vampírico que se dedica a ayudar a los desamparados, sobre todo a un travesti epiléptico (John Lloyd Cruz) con quien entablará un vínculo crucial para el devenir de la historia.

Teniendo en cuenta que ‘A Lullaby to the Sorrowful Mystery‘ duraba 8 horas y ‘Evolución de una familia filipina’ casi once, las cuatro horas de ‘The woman who left’ resultan insignificantes. Bromas aparte con la discutible concepción del tiempo del cineasta filipino, en su última película es destacable la cruda imagen social mostrada, pero posee un estilo visual y narrativo tan particular que resulta inevitable la controversia.

Lav Diaz se limita a colocar la cámara en un punto fijo y a rodar con planos generales y sin movimiento, huyendo sistemáticamente de los primeros planos, el plano/contraplano o movimientos de cámara que en ocasiones pedía a gritos la historia en algunas escenas. Una decisión estética que no le hace mejor cineasta, al igual que el excesivo metraje no hace a la película más compleja o artística. Tampoco el hecho de su reconocimiento con el León de Oro en Venecia debe cegarnos para poner el foco en determinados aspectos técnicos y narrativos muy cuestionables en la película. Por ejemplo, la dilatación excesiva de muchos planos cuando la información contenida en ellos ya lleva tiempo agotada. Diálogos superfluos que no enriquecen la historia y hasta un hiperrealismo un tanto impostado.

En definitiva, justificaciones que solo obedecen a un criterio de hacer cine que antepone las formas y el pose estético sobre una trama de por sí tan predecible como vacua que bebe de las fuentes de la literatura rusa, en concreto de una relectura de un relato breve de Tolstói.

«The woman who left» dirigida por Lav Diaz

Lo que si nos parece destacable es la cruda y descarnada imagen social mostrada por Diaz al exhibir a esos seres olvidados en la marginación y la pobreza. Su clara intencionalidad al rechazar el embellecimiento le permite adoptar una escenografía natural marcada por la fotografía en blanco y negro. Temas como la sexualidad, la muerte, la pobreza y la marginación están presentes. Sobre esta base, logra estructurar a los personajes para mostrar una realidad social desgarradora. Hay escenas que matizan con maestría las condiciones de miseria, pobreza, sexualidad y marginación que propician el clima de violencia que refleja la película. No en vano, el cineasta filipino se caracteriza por abordar temas sociales y políticos de su país de origen. Y en esto, no cabe duda, es un maestro.

Harmonium (Japón). Dir. Kôji Fukada

Tras haber ganado el Premio del Jurado en Un Certain Regard en la pasada edición del Festival de Cannes pudimos ver ‘Harmonium‘, otra de las presencias del cine asiático de la sección oficial del certamen grancanario. Se trata del quinto trabajo del director japonés Kôji Fukada, uno de esos autores nipones a tener en cuenta de cara a un futuro.

La película mezcla con habilidad un género japonés por excelencia como el drama familiar con el thriller, para contarnos como Toshio y su esposa Akié llevan una vida familiar apacible junto a su hija. De repente, una mañana las reminiscencias del pasado (otra vez como amenaza) llega de la mano de Yasaka (Tadanobu Asano), un misterioso personaje que invade el espacio físico y psicológico de la familia de manera muy sutil para cambiarlo todo para siempre.

Uno de los aciertos del filme es la manera de revelarnos el castigo como la otra cara del crimen y explorar tanto en la conciencia como en el sentimiento de culpa. También respecto a la felicidad, ya que esta no se puede alcanzar con una planificación calculada. Si el perfil psicológico que realiza de su personajes es sencillamente interesante, la presencia del hijo de Yasaka en el entorno familiar, casi en la segunda mitad de la cinta, aunque vital para la trama, resulta tan forzado que es cuando la película pierde algo de su rigor cinematográfico.

Aun así, la experiencia cinematográfica de ‘Harmonium‘ es atrapante y cruda, cercana a la literatura de Dostoyevski, de donde bebe sus fuentes. Una tragedia asiática que nos invade de principio a fin a un ritmo pausado pero constante, como si un metrónomo se encargará de mantener el pulso constante a la película. Kôji Fukada ha subido el nivel del festival con creces, algo que se agradece de veras. No en vano, la película ha logrado el Premio del Público que otorga el jurado popular formado por un heterogéneo grupo de 30 cinéfilos.

Un minuto de gloria (Bulgaria). Dir. Kristina Grozeva, Petar Valchanov

Después de que el festival de Gijón se rindiera a sus pies, llega triunfante ‘Un minuto de gloria‘, lo mejor que se ha visto, junto con la nueva película de Kaurismäki, en el festival de cine de Las Palmas 2017.

Kristina Grozeva y Petar Valchanov dirigen un agudo drama que toma como punto de partida un suceso real que apareció en la prensa búlgara: un empleado de mantenimiento de ferrocarriles alerta a las autoridades tras encontrar una gran cantidad de dinero tirado en las vías del tren. Esa buena acción le convertirá (aquí empieza la ficción) en el héroe del momento, susceptible de ser manipulado en beneficio de las corruptas estructuras de poder.

«Un minuto de gloria» (Slava Glory) dirigida por Kristina Grozeva y Petar Valchanov

Magistral como funde el drama social con el cine político. Ingeniosa la manera de construir a los personajes y darles vida en un guión no exento de mucha dureza. Respecto al reparto, Stefan Denolyubov está extraordinario dando vida a Tzanko Petrov, así como Margita Gosheva en la piel de Staykova. Aunque el exceso de protagonismo de esta última respecto a su vida personal sobra porque el personaje ya estaba suficientemente caracterizado desde las primeras escenas. Excepto esta reiteración el resto de la historia funciona a la perfección.

El reloj, a modo de macguffin obtiene la excusa argumental perfecta en la película. También el hecho de presentarnos a Tzanko como un tartamudo ayuda a que empaticemos, si cabe más con el personaje para acabar justificando el grandioso, perverso y único final que podía tener la película. Un fascinante ‘unhappy ending’ que te obliga a reflexionar, pero que a pesar de su gran carga dramática te hace sonreírEn pocos segundos llegas a la conclusión de haber presenciado el mejor final posible. Sublime.

Deseamos que se estrene pronto porque seguro tendrá muy buena acogida por parte de los espectadores. Por películas como esta hay que apostar, no solo por la asombrosa capacidad que tiene para entretener, sino también para denunciar y sacudir conciencias con una inteligencia fuera de lo común.

Golden Exits (USA). Dir. Alex Ross Perry

Después de que el festival de cine de Las Palmas le dedicara una retrospectiva en 2015, Alex Ross Perry regresa con su quinto largometraje, que gira en torno a dos parejas de clase acomodada que residen en Brookyn. La llegada de una atractiva chica australiana que convivirá con ellos por motivos laborales amenaza con destapar las frustraciones de estos personajes, incapaces de cambiar sus vidas tal y como desean.

Golden Exits‘ la vimos en la 67ª edición de la Berlinale y es un “fascinante estudio sobre la soledad y la infelicidad poblado de diálogos en los que se alcanza una enorme profundidad y relevancia. Su película es teatral por la forma en la que están dirigidos los actores, pero a la vez profundamente cinematográfica”. Una de las voces más personales del cine indie estadounidense que ha dejado un buen sabor de boca entre los espectadores que la han visto en Las Palmas de Gran Canaria. En el reparto muy buenas interpretaciones a cargo de Emily Browning, Mary-Louise Parker o Chloë Sevigni.

Un palmarés controvertido pero fiel al festival

El palmares de esta 17ª edición ha estado muy repartido entre todas las categorías. Como ya ocurriera el año pasado ha vuelto ha ganar una película china. En esta ocasión el documental ‘Bitter Money‘ se ha alzado por unanimidad de todos los miembros del jurado con la Lady Harimaguada de Oro en el festival de cine de Las Palmas 2017. Una película que fija su cámara para retratar los problemas de los trabajadores de las grandes ciudades del Este de China. Una propuesta singular que ha convencido al jurado, el cual ha declarado que se trata de un largometraje  “formalmente preciso, inmersivo y devastador de un sueño chino convertido en pesadilla”.

Algo muy discutible teniendo en cuenta la calidad de otros títulos como ‘El otro lado de la esperanza’, ‘Golden exits’, el documental de Raoul Peck ‘I am not your negro’ o la misma película japonesa ‘Harmonium’.

 Lectura del Palmarés en el Teatro Pérez Galdós
Lectura del Palmarés en el Teatro Pérez Galdós.

Cuestionable si cabe más que la argentina ‘Kékszakállú‘ haya ganado la Lady Harimaguada de Plata. El jurado la definió en su fallo como “un objeto misterioso nacido en el castillo de Barba Azul”. Se trata de una ficción sin guión alguno que como experimento tiene un pase, pero su premio solo viene a subrayar la necesidad del festival de Las Palmas de diferenciarse de otros certámenes cinematográficos y ser fieles a ese tipo de cine tan personal por el que apostó siempre, aunque como espectadores nos sintamos bastante alejados.

Merecidos los premios en categorías interpretativas, aunque Olivia Cooke en ‘Katie says goodbye’ también nos gustó mucho y era digna candidata. Sakari Kuosmanen por su magnífico papel en la última película de Kaurismäki hubiera merecido mejor suerte.

Palmarés del Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria 2017
  • Lady Harimaguada de Oro: Bitter Money (China) de Wang Bing.
  • Lady Harimaguada de Plata: Kékszakallú (Argentina) de Gastón Solnicki.
  • Premio a la Mejor Actriz: Véro Tshanda Beya Mputu por Félicité.
  • Premio al Mejor Actor: Adam Horovitz por Golden Exits.
  • Mención Especial: Charo Santos-Cocio por su interpretación en The Woman Who Left.
  • Premio del Público: Harmonium (Japón) de Kôji Fukada

Podéis consultar la lista de galardonados en la página oficial del Festival de Cine de Las Palmas. Hasta la próxima edición.

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