
‘Survival Family‘ del japonés Shinobu Yaguchi es un película de catástrofes que mezcla humor con un poco de drama. Pese a tratar sobre un apagón global producido por una tormenta solar, la cinta se desarrolla desde un punto de vista diferente al evitar regodearse en la muerte y destrucción. Más bien se centra, sin histrionismos, en las dificultades a las que se enfrenta una familia media japonesa cuando hay un apagón eléctrico en uno de los países digitalmente más avanzados del mundo.
La familia Suzuki vive en Tokio y tiene características prototípicas de familia nipona de gran metrópoli. Padre oficinista de mediana edad cómodo en su rutina, madre de carácter dulce y apocada al cuidado del hogar y dos hijos adolescentes (chico y chica) enamorados de la moda juvenil y la tecnología. Lo que en principio podría ser un simple, pero fastidioso corte eléctrico que impide preparar el desayuno, coger transporte al trabajo o chatear con los amigos, empieza a convertirse en una pesadilla cuando perdura en el tiempo, hay escasez de suministros y no se puede ocupar el tiempo en tecnología.
Llega el momento en el que ‘Survival Family’ torna en una interesante reflexión sobre la intoxicación tecnológica. Cómo esa falta de electricidad permite descubrir el trinar de los pájaros, el brillar de las estrellas o la paz de los espacios en silencio. O simplemente cómo fuerza a los miembros de una familia a estar juntos mirándose a los ojos y conversar. También la cinta permite reflejar la mezquindad del ser humano en situaciones límite y la incapacidad del ciudadano hiperconectado actual para sobrevivir sin herramientas electrónicas que le hagan el trabajo.
La película se convierte en una ingeniosa road movie donde la familia vaga para establecerse en un lugar con suministro eléctrico y víveres. Un viaje de supervivencia que les permite descubrir sus incapacidades, fortalezas y puntos de mejora como núcleo familiar. ‘Survival Family‘ es una cinta del género de catástrofes sin grandes pretensiones pero que marca una gran diferencia con otras de su género. Una aportación ingeniosa del cine japonés a la sección oficial de la edición número 50 del Festival de Sitges.