
El concierto Live Aid en Bohemian Rhapsody pone los pelos de punta. ¿Quién puede olvidar aquella euforia vivida en 1985, cuando Freddie Mercury, desfilando sobre el escenario, llevó al público a un frenético canto al unísono? Han pasado más de 25 años desde la muerte del líder y voz principal de Queen, pero su música perdura.
‘Bohemian Rhapsody’, el biopic sobre su vida termina recreando la triunfal reunión en el Live Aid, en la que Freddie Mercury, mientras sufría una enfermedad que amenazaba su vida, lideró a la banda en uno de los conciertos de rock más grandes de la historia que nunca se olvidarán. El look y los exteriores de la película están sumamente cuidados, pero ninguno como el del concierto solidario celebrado en 1985 para combatir el hambre en Etiopía.
Recrear el mítico concierto Live Aid en Bohemian Rhapsody
Uno de los decorados más grandes y complicados fue la recreación del concierto Live Aid celebrado en el emblemático estadio de Wembley en Londres. Primero, tenían que encontrar un lugar lo suficientemente amplio como para albergar un escenario a escala real que permitiera en un único plano, captar la llegada de Freddy Mercury a Wembley, su vestuario, el backstage, y la reacción del público cuando pisa el escenario. Tras una búsqueda exhaustiva, el director de producción y su equipo dieron con el aeródromo de Bovingdon en Hertfordshire, cuya pista de aterrizaje es lo suficientemente lista como para permitir la construcción. El equipo tenía que contar entre otras cosas con el impredecible verano inglés cuando, en el mes de julio, cuando se acometió la construcción del decorado, y en septiembre, cuando se inició el rodaje, el clima se asemeja más bien al invierno californiano.
«Recreamos el estadio de Wembley a partir de fotografías de la época, así como de documentales del espectáculo, pero también teníamos que crear un set que contara bien la historia». Aaron Haye, director de producción de Bohemian Rhapsody.
En realidad el backstage de Live Aid en ‘Bohemian Rhapsody’ era un puñado de caravanas ubicadas fuera del estadio. Se decidió crear un espacio para los artistas detrás del escenario con una caravana de marca Airstream y sombrillas de jardín junto con sillas para crear un ambiente divertido, a medio camino entre interior y exterior, con la emoción de la proximidad al escenario.
Se levantó una plataforma elevada de casi cinco metros y medio, para igualar la altura del escenario de Wembley durante el concierto Live Aid y acto seguido, se edificó una carpa encima del backstage para soportar las inclemencias del tiempo. También se recrearon los andamios del Live Aid en Bohemian Rhapsody, al igual que los pósteres, y otros carteles de tamaño mayor, algunos de tres plantas de altura, así como los logotipos que adornan los laterales del escenario.
«Fue llegar al estadio y sentir la emoción». Peter Freestone, refiriéndose al épico 13 de julio de 1985.
El asistente personal de Freddie Mercury, Peter Freestone, que estuvo con él los doce últimos años de su vida, fue consultor de la película y sus conocimientos fueron valiosísimos en este sentido. Gracias a su descripción al detalle de la zona del bacstage del Live Aid, Haye y su equipo pudieron crear un ambiente auténtico de este.
Había muy buen ambiente. Muy amistoso, sin competitividad, que suele pasar cuando cuentas con un plantel como éste. Queen se hizo con el escenario y el público estaba entregado desde las primeras estrofas de ‘Bohemian Rhapsody’. Y entonces el ambiente en el backstage cambió. Era eléctrico. Algo había pasado. Dieciocho minutos después la banda se despide y lo habían conseguido. El público enloqueció, y todas las personas en el backstage estaban aplaudiendo, cuenta Freestone.
«Live Aid fue un espectáculo tan importante, tan hermoso que era nuestra obligación rendirle homenaje». Graham King, productor de Bohemian Rhapsody.
El duro trabajo dio sus frutos. «Fue alucinante», dijo Brian May. «Desde el segundo que pisé el escenario me pareció surrealista porque era una réplica perfecta del escenario de 1985 cuidando cada detalle, hasta los amplificadores detrás mía, los pedales, las telas, el backstage, las colillas, los ceniceros, y las coca-colas. ¡Lo han hecho genial!»
La música en Bohemian Rhapsody
Una de las funciones principales en la película fue la supervisión musical. Becky Bentham fue la encargada de la abrumadora tarea de crear la banda sonora de la película, usando la voz real de Freddie Mercury, a un imitador y a Rami Malek.

Tras discutirlo con el director y el productor, Bentham categorizó cada canción dependiendo si era una actuación frente a la cámara o si era vídeo de fondo. Habiendo establecido todo el material disponible, desde pistas de acompañamiento hasta voces, Bentham acabó con una lista de requisitos para cada sesión de pregrabación. Luego dispuso de todos los materiales necesarios para cada reproducción. Las grabaciones previas fueron enviadas al reparto para practicar con instructores de canto e instrumentos.
“Para ‘Bohemian Rhapsody’, tuvimos la suerte de poder acceder a todas las grabaciones vocales originales”, dice Becky. “Adicionalmente, hemos grabado una voz similar para las secciones donde no hay grabaciones existentes, así como las actuaciones de Rami Malek, lo cual conformó una biblioteca de material que convertimos en una banda sonora lo más auténtica posible”.
Para todas las escenas cantadas, Bentham exigió a los actores que cantaran junto a las pistas pregrabadas. “Es vital para conseguir el movimiento de la garganta y los músculos faciales”, explica.
Bentham rinde tributo a Malek y al resto del elenco. “Es un mérito de los actores y refleja las horas dedicadas con sus entrenadores para lograr lo que conseguimos”, asegura. “Ben Hardy ya tocaba un poco la batería, así que tuvimos un marco sobre el cual construir. Gwilym Lee tocaba algo de guitarra, y Joe Mazzello un poco de bajo. Igual que Rami, todos pasaron largas horas trabajando a partir de las grabaciones previas. Para Rami, grabamos el audio y vídeo de nuestro imitador para que pudiera tener referencia auditiva y visual y así asegurar que incorporaba el mismo lenguaje corporal, desde los movimientos hasta las respiraciones”.