
Los hoteles son un refugio, ya sea para engendrar la locura que te hará matar a tu familia con un hacha, invocar al Señor Oscuro o simplemente sentirte perdido en mitad de Tokio y de tu vida. Incluso son un lugar perfecto como bien cuenta ‘Malos tiempos en El Royale’ para expiar y que espiemos los pecados de sus huéspedes. Adelante, sed bienvenidos.
A las orillas del lago Tahoe, entre sobre las alfombras del Royale se dan cita siete desconocidos, cada uno con un secreto casi tan oscuro como el lúgubre lugar dividido entre los estados de Nevada y California. En el transcurso de la que será una horrible noche, todos tendrán una última oportunidad de redención dentro de este averno particular.
El encargado de traernos este relato es Edward Goddard, el realizador de la genial ‘La cabaña en el bosque‘, uno de los títulos más estimulantes de su género en estos últimos años por su gamberro planteamiento y originalidad. Atrás quedan ya los innumerables problemas de distribución de esa ópera prima, el Royale llega a 121 salas en España con un reparto plagado de caras conocidas.
Interesante propuesta con tintes de comedia negra, Goddard y compañía vuelven con una historia de intriga, mentiras cruzadas y algún que otro intento de pincelada de buen cine. En este relato por capítulos, es palpable como ‘Malos tiempos en El Royale’ bebe de maestros de este género como Tarantino o los Coen sin los resultados esperados.
Escrita por el propio Goddard, el filme cuenta con un reparto coral encabezado por un cura (Jeff Bridges) y una aspirante a cantante (Cynthia Erivo) que acompañan a los otros huéspedes como Dakota Johnson y Jon Hamm. Conjugar un reparto tan nutrido con acierto es complicado por eso otros como el personaje de Chris Hemsworth directamente sobran. Todos ellos deberán luchar contra las circunstancias que los han llevado allí, así como la desesperante falta de ritmo tras el nudo de la historia.
Buena puesta en escena y una riquísima playlist de canciones sesenteras de cara a tu lista de Spotify interpretadas por el esperanzador personaje de Cynthia Erivo. Estimulantes, pero a ratos excesivamente omnimpresentes melodías a cargo del Michael Giacchino. Lo expurgatorio se convierte en un batiburrillo de mentiras y conflictos esbozados con algún que otro escopetazo en el pecho que complica el desenlace de esta ficción pulp. Todo quema y se digiere peor al término.
Encargada de cerrar este año el Festival de San Sebastián, ‘Malos tiempos en El Royale‘ es un thriller curioso y recomendable, pero desigual lastrado en gran medida por su excesivo metraje que puede hacer que el espectador haga check out antes de tener que abandonar la sala.