
En 1996, un año antes de que la homosexualidad fuera despenalizada en China, se rodaba ‘East Palace, West Palace‘, uno de los mejores títulos del cine gay chino dirigido por Zhang Yuan y basado en un cuento del novelista clandestino pequinés Wang Xiaobo. La película fue inmediatamente prohibida en su país de origen, lo que en cierto modo le abrió sus puertas al exterior, ya que el filme fue seleccionado en el Festival de Cannes de 1997 y llegó a ganar tres premios en el Festival de Mar del Plata.
Considerada en gran medida la primera película gay de China, ‘East Palace, West Palace‘ sigue siendo la más atrevida y lograda del cine chino gay «ilegal» realizado en los años 90, y probablemente la última, ya que llevó a la Oficina de Cinematografía a prohibir formalmente la producción no autorizada y confiscar el pasaporte de Zhang Yuan, un director heterosexual que únicamente quería reflejar en el cine lo difícil que es ser gay en su país.
Ambientada en parques imperiales del centro de Beijing, en el que los homosexuales ligan, un joven escritor es perseguido por un guardia. Después de una persecución el joven se entrega y hace que el guardia se interese por él contándole su historia personal y vida sexual.
La película explora los nexos entre el poder del Estado y el sadomasoquismo en un modo que pocos se atreverían a hacer, especialmente en China. La fotografía muestra espacios arquitectónicos de los manchués, nacionalismo, revolución y periodos capitalistas.
En los siglos XVIII y XIX Beijing era una de las ciudades más tolerantes, eróticas y un enclave homosexual del mundo. Pero hoy, a pesar de que la homosexualidad no es ilegal en sí misma, se arresta a algunos gays y lesbianas repetidamente por merodear, especialmente por practicar sexo en público, y a los reicidentes se les imponen largas condenas en prisión e incluso sentencias de muerte.
Ha tenido que pasar más de una década para que se estrenara la película ‘Seek McCartney‘ (2018) dirigida por Wang Chao, la primera cinta de temática homosexual que ha pasado el filtro de la censura en China. La película narra una relación secreta entre un chino (interpretado por el cantante pop Han Feng) y un francés (el actor Jérémie Elkaïm). ¿Significa que China levanta el veto al cine homosexual? Pues no debe hacernos suponer que todas las cintas de temática similar vayan a superar con éxito la estricta censura de un país donde doce millones de homosexuales se han casado con mujeres para evitar la discriminación social y laboral.