
Sentir que estás en una etapa transcendental de crecimiento y desarrollo en la vida donde casi siempre la cagas. En ese sentido, los adolescentes y las personas que traducen títulos de películas en España como ‘Súper empollonas’ tienen mucho en común. Con todo, el debut en la dirección de la actriz Olivia Wilde es un retrato disfrutón, desenfadado y empoderador que marca el punto de partida de una revolución ansiada en el género de las comedias adolescentes de esta nueva generación. Un trabajo que, sin duda, le vale a Wilde para entrar en el grupo de directoras a seguir de cerca.
Dos estudiantes modelos y grandes amigas, Amy y Molly descubren en la víspera de la graduación de su etapa en el instituto que podrían haberse esforzado algo menos en clase y haberse divertido más. Una crisis que marcará el objetivo de nuestras protagonistas: compensar lo no experimentado en estos años en una noche de fiesta y desenfreno. ‘Súper empollonas’ (Booksmart en su título original) se erige como una de las comedias del año. Y con razón. Una historia plural y reivindicativa de sororidad adolescente que aborda temas capitales de todo joven en la actualidad como la sexualidad, la toma de decisiones o el empoderamiento.
Wilde construye dos personajes irreverentes y feministas interpretados magistralmente por Kaitlyn Dever y Beanie Feldstein. Las chicas emprenderán la misión de concentrar cuatro años de diversión en una sola noche. La directora actualiza un esquema argumental que funciona casi siempre, porque, al fin y al cabo, lo que importa es su capacidad universal de identificarnos con las peripecias y la frescura del relato. Ambos elementos apuntan a lo sobresaliente en el filme. Algo que le vale la comparación con el fenómeno generacional ‘Supersalidos’ de Gregg Mottola, aquel análisis genial de la sensibilidad adolescente (masculina) de hace una década.

Mordaz y tierna, ‘Súper empollonas’ habla temas sobre la libertad sexual o el empoderamiento femenino sin tapujos, lo que le ha valido ya el respeto y reconocimiento con excelentes críticas de los medios. Los diálogos —ágiles y certeros con momentos de una excentricidad conceptual notable— demuestran que el trabajo de Wilde y compañía es superior a la de una comedia coming-of-age al uso.
Aunque el filme no habría funcionado igual si no fuera por la química que hay entre sus dos protagonistas, el papel de los personajes de reparto es clave. Aparte de Feldstein y Dever, a las órdenes de Olivia Wilde también destacan rostros conocidos como el de Lisa Kudrow, Jessica Williams, Jason Sudeikis, Will Forte o Skyler Gisondo. Por su parte, Katie Silberman, coguionista de la serie de Netflix ‘¿No es romántico?’, firma el guion del filme.
Una sucesora inesperada y maravillosa de la ‘Lady Bird‘ de Greta Gerwig que reinventa las películas de fiestas juveniles salvajes con bastante habilidad a pesar del vértigo de ser una ópera prima. ‘Súper empollonas’ es una obra hábil que destaca en su papel de celebrar la consolidación de una amistad tan fuerte que garantiza la fiesta hasta el último minuto de metraje.
Wilde merece reconocimiento por lograr ese humor y energía en la manera en que Amy y Molly se comunican: no solo es natural, también hilarante proyectándolo con calidez y ternura al espectador. Una historia inteligente y salvaje. Tanto desde cerebro como del corazón.