
Último domingo de enero y último repaso a la categoría secundaria, esta vez desde el prisma de los actores, donde la Academia formó uno de los quintetos más bestiales en términos de calidad actoral que se recuerdan. Aquí sucede tres cuartos de lo mismo que en la categoría de actriz secundaria: toda la temporada ha sido dominada por un mismo nombre, y en su caso además no ha tenido que repartir siquiera los premios de los círculos de críticos de América con otro rival, como sí lo ha hecho Laura Dern con la ausente Jennifer López. Mejor Actor de Reparto ya tiene escrito el nombre de su poseedor. Brad Pitt es favorito al Oscar.
24 años después de su primera nominación por ’12 Monos’, el mundo por fin va a poder decir que Brad Pitt tiene un Oscar (que sí, que ya lo ganó como productor en 2013 por ’12 Años de Esclavitud’, pero ese no es por actuar). Dominador absoluto de la temporada imponiéndose en citas claves como los Globos, los Critic’s y los SAG, su más que probable triunfo el próximo día 2 en los BAFTA significará que oficiosamente será el ganador del Oscar a mejor actor secundario. Está además en una de las películas aspirantes al premio gordo y su narrativa le acompaña: una leyenda que todavía respira sin un Oscar. La seguridad en sus discursos como ganador indica que hasta el propio Brad sabe que ha llegado su momento, que será uno de los más celebrados y emocionantes de toda la gala.
No hay mucho que rascar en contra de la victoria de Pitt, por lo que hay que irse a los motivos de peso de los rivales de Brad, y en el caso de Joe Pesci, el principal que existe es precisamente que es Joe Pesci. El actor de New Jersey está teóricamente retirado de la actuación profesional, pero cuando su nombre emergió para ser Russell Bufalino en ‘El irlandés’, parecía estar automáticamente nominado. Tiene uno de los Oscar más incontestables de la historia por ‘Uno de los nuestros’ en 1991, y que no haya hecho campaña estando nominado a todo no ayuda, pero es una institución para la industria y su papel ha sido lo más destacado de la película (por el que ha ganado 10 premios de la crítica). Cada vez que ha colaborado con Scorsese ha peleado el premio, así que si alguien puede quitárselo a Brad, ese es Pesci.

En un claro segundo lugar se encuentran Tom Hanks y Al Pacino. El primero es uno de los actores más respetados de Hollywood. Si bien Hanks no fue uno de los fijos en la terna durante los meses donde la crítica entregaba sus premios (se llevó el de North Texas y el de la organización sin ánimo de lucro AARP), su gran discurso al recibir el premio Cecil B. DeMille en los Globos de Oro lo puso definitivamente en órbita hacia el Oscar. Ganador de dos premios al Mejor Actor por ‘Forrest Gump’ y ‘Philadelphia’ de manera consecutiva además, este año recibe su primera nominación en la categoría de reparto por hacer del icono televisivo Fred Rogers en ‘Un Amigo Extraordinario’, pero apenas tiene posibilidades. Su presencia aquí debe tomarse como un abrazo de vuelta a los Oscars: Hanks llevaba 20 años sin estar nominado.
¿Por qué debe tomarse la nominación de Hanks así? Porque si sus 20 años de ausencia resultan flagrantes, peor resultan los 27 que ha estado sin estar nominado Al Pacino. Después de que ganara su único Oscar en 1993 por ‘Esencia de Mujer’ luego de perder siete veces, Pacino desapareció del radar de la Academia. Su Jimmy Hoffa en ‘El irlandés’ recuperaba a ese animal desatado y salvaje que tanto gozo cinematográfico dio durante los 70s y 80s. Su presencia en la categoría no era segura, pero la posibilidad nunca se vio debilitada, puesto que no ha fallado en la temporada y si algo fue aplaudido de ‘El irlandés’ fue el estado de forma de su reparto. La vuelta de Pacino al juego académico deja la misma sensación que el regreso de Pesci: es un placer volver a verle de esta guisa, caballero, no se vaya más.
Otro que rebasó las dos décadas sin recibir nominación fue Anthony Hopkins. En 1997 fue nominado por ‘Amistad’ y han tenido que pasar 23 años para que vuelva a una terna de nominados. Su interpretación del Papa Benedicto XVI en ‘Los Dos Papas’ fue aclamada junto a la de Jonathan Pryce desde que la película se estrenó en el Festival de Telluride, y a pesar de que ambos han sufrido altibajos en la carrera (los dos sufrieron ausencia en los SAG en sus respectivas categorías), eran dos candidatos fuertes a llevarse las últimas plazas de sus ternas. Hopkins, como Joe Pesci, tiene otro de los Oscars más indiscutibles que se recuerdan por su terrorífico Hannibal Lecter en ‘El Silencio de los Corderos’. No hay sensación de deuda con él, y el estar en una película pequeña en la carrera (solo 3 nominaciones), le hace ser un invitado de alto honor en la categoría sin opciones reales de ganar el premio.
Todo parece indicar que Brad Pitt va a recibir el próximo día 9 de febrero su primer Oscar como actor por su papel de Cliff Both en ‘Érase una vez en Hollywood’. Una derrota en los premios del cine británico tambalearían muy levemente sus opciones, porque la convicción que se tiene con la victoria de Brad es más palpable que especulativa. Los aplausos que ha levantado con cada galardón este año así lo indican, pero es que a su lado están Joe Pesci, Al Pacino, Tom Hanks y Anthony Hopkins en una de las mejores categorías secundarias que se recuerdan. La sorpresa de que Pitt pierda, aunque es estadísticamente improbable, es potencialmente posible dada la envergadura de sus contendientes. Pero a fecha de hoy Brad Pitt es el favorito al Oscar como Mejor Actor Secundario.