
El BCN Film Fest 2021 (Festival de Cine de Barcelona – Sant Jordi) alcanza su quinta edición y lo hace con una decidida apuesta por el formato presencial. Las salas de los barceloneses cines Verdi, abiertas con el 50% del aforo disponible para respetar el protocolo sanitario, continúan siendo la principal sede de un certamen dedicado a las adaptaciones literarias, con especial predilección por el cine histórico y el biopic, que este año acoge una retrospectiva de cine japonés en colaboración con CineAsia.
El festival, dirigido por la periodista Conxita Casanovas, ha contado en su primer fin de semana con dos invitados de excepción. Mientras el popular Johnny Depp revolucionaba el barrio de Gracia para presentar ‘El fotógrafo de Minamata’, la francesa Isabelle Huppert comparecía ante el público para charlar sobre el thriller ‘Mamá María’. Son solo dos de los alicientes de un evento que se prolongará hasta el próximo 23 de abril, coincidiendo con la festividad de Sant Jordi en la ciudad condal.
Mamá María (Francia). Dir. Jean-Paul Salomé
Poco puede decirse de Isabelle Huppert sin caer en la obviedad. Estamos ante una de las grandes damas francesas de la interpretación, que ha trabajado con varios de los cineastas clave de la cinematografía francesa, y cuya versatilidad no recae en lo camaleónico, sino justo al contrario, en atraer cada uno de sus personajes a su propio carisma y personalidad.
Hay en efecto mucho de Huppert en cada una de sus criaturas, incluída la ‘Mamá María‘ de Jean-Paul Salomé, una traductora de árabe que trabaja para la brigada antinarcóticos de la policía francesa y que, por azares del destino y manejo de información privilegiada, acabará convertida en una improbable camella que hará desesperar al comisario, que es además su pretendiente.
La película es un polar contemporáneo y juguetón, que combina con habilidad un retrato conciso del narcotráfico en Francia, deteniéndose en la sociología de esos barrios parisinos en los que se mueven los hilos del gran negocio ilegal, con un estudio de personaje (no exento de licencias humorísticas) que Huppert aprovecha para construir una villana fascinante con la que el espectador empatizará aunque no lo quiera.
Sombra (Portugal). Dir. Bruno Gascon
Se estrena en el BCN Film Fest 2021, el segundo largometraje de Bruno Gascon que explica un suceso real sobre la desaparición de un niño de 11 años en el Portugal de los años 90. El filme, de estructura canónica, plantea tres actos diferenciados. El primero, narra la desaparición del joven y los estragos de la familia ante la inacción policial, el segundo, cuenta la reapertura del caso de la mano de un joven inspector, y el tercero nos lleva ante el juicio al principal sospechoso.
Ana Moreira, que ha trabajado con personalísimos autores como Miguel Gomes (‘Tabú’) o Eugène Green (‘La religiosa portuguesa’) da vida a la sufrida madre coraje que intenta arrojar luz a la desaparición de su hijo mientras los años sin respuestas la van consumiendo. Su entregada interpretación logra emocionar mostrando sus heridas internas en cada gesto y es, de largo, lo mejor de una película parsimoniosa y de escasa progresión dramática, sin mayor alcance que el testimonio del dolor.
Solo una vez (España). Dir. Guillermo Ríos Bordón
La ópera prima de Guillermo Ríos adapta una pieza teatral de la reputada dramaturga Marta Buchaca que versa sobre la violencia machista y sus estragos. La protagoniza Ariadna Gil, en la piel de una trabajadora social que trata de mediar en la problemática relación entre un popular novelista (Alex García) y su pareja y editora (Silvia Alonso) a la que ha agredido tras una acalorada discusión, mientras sufre el acoso de la pareja de una de las víctimas a las que atiende.
El texto, adaptado al cine por la propia autora de la obra original, posee interesantes apuntes sobre el caldo de cultivo del maltrato machista y evidencia las dificultades de trazar un perfil concreto sobre los agresores. Le falta sin embargo sutileza en la plasmación concreta de su tesis en la historia de unos personajes que se perciben como estereotípico objeto de estudio, y no como seres de carne y hueso con matices. Destaca, eso sí, el notable trabajo interpretativo de Alonso.
Una joven prometedora (Reino Unido). Dir. Emerald Fennell
Ríos de tinta corren desde hace semanas por las redes sobre ‘Una joven prometedora‘, multipremiado debut tras la cámara de Emerald Fennell que se ha convertido en una de las sensaciones de la temporada, y que se estrenaba en cines comerciales este mismo fin de semana tras su pase inaugural en el BCN Film Fest 2021 el jueves.
Protagonizada por una espléndida Carey Mulligan, la película de Fennell juega habilidosamente con las expectativas del espectador acercándose a los arquetipos del subgénero de ‘violación y venganza’ y de la comedia romántica, para pervertirlos con un par de giros de guion bien colocados con la intención de llevar a la audiencia al terreno de su discurso feminista tan oportuno como, por momentos, problemático.
Fennell envuelve el universo de su heroína en una lisergia de tonos pastel y música pop, desde la que se intuye pronto una oscuridad latente relacionada con un pasado que la atormenta y marca cada uno de sus pasos. Su potencia visual es indiscutible, pero hay altibajos en la escritura, pues la formulación de su tesis abraza incongruencias en los actos finales de su heroína, y la historia se zambulle en lo inverosímil en un epílogo que busca el impacto de lo rebuscado.