Lado Kvataniya: «Buscamos que el espectador se implicara en la investigación»

A sus 34 años, y con un puñado de cortometrajes a sus espaldas, el cineasta georgiano Lado Kvataniya ha debutado en el largometraje con ‘The Execution’, un impactante thriller criminal inspirado en la historia de un asesino en serie que actuó durante décadas en la Unión Soviética sin que la policía pudiera encontrar su paradero. La película ha participado en la sección oficial competitiva de la 54 edición del Festival de Sitges, obteniendo el aplauso de la crítica y una mención especial del jurado.
Con motivo del estreno del filme en el certamen catalán, Lado Kvataniya ha contestado a nuestras preguntas sobre su ópera prima, que cautivará sin duda a los fans de los thrillers de Fincher y el ‘Nordic Noir’, y podrá verse en España gracias a la plataforma online Filmin, que ha adquirido con buen criterio sus derechos de distribución en nuestro país.
Entrevista a Lado Kvataniya, director de The Execution
• Enhorabuena por la mención especial del jurado recibida en Sitges donde la película ha gustado mucho. A la hora de abordar el guion, que has escrito junto a Olga Gorodetskaya, ¿cómo trabajasteis para intentar aportar algo nuevo al género criminal y distinguiros de trabajos previos sobre el mismo caso que narra el filme, como la tv movie de HBO ‘Citizen X’?
En primer lugar quiero decir que para mí es muy importante recibir una mención del jurado porque es mi primera película y me hace muy feliz. Por supuesto que he visto muchísimas películas sobre asesinos en serie de los 90, incluída ‘Citizen X’, y de algún modo funcionan todas ellas como referentes para ‘The Execution’. Sin embargo, es importante aclarar que nuestra película no está ‘basada en hechos reales’ sino simplemente inspirada por ellos. Intentamos utilizar este caso en concreto, no para reconstruir los hechos como hacía ‘Citizen X’, sino para narrar una historia que en realidad funciona más bien como una tragedia griega. Queríamos crear en el espectador la sensación de estar en un territorio que conoce, cercano a las convenciones del género, para buscar la sorpresa con un tramo final que gira hacia otro tipo de historia con más matices.

• En muchas de las reseñas que hemos leído sobre tu película, se menciona a David Fincher. También hay determinados pasajes que remiten también al cine de Aleksei Balabanov. ¿Cuáles son en realidad las referencias cinematográficas o literarias que tenías en mente a la hora de desarrollar la historia y plasmarla en imágenes?
David Fincher es por supuesto una referencia obvia, tanto en términos estilísticos como visuales. Su aportación al género es tan importante que es muy difícil no verse influido por su grandísimo trabajo. Me gusta que menciones también a Aleksei Balabanov, fue sin duda otro de los cineastas de referencia para construir la atmósfera de la película, como también lo fueron algunos de los primeros trabajos de otro cineasta ruso, Nikita Mihalkov. También buscamos una narrativa no lineal, en la línea de ‘El conde de Montecristo’, pero también hay referencias estéticas procedentes de artistas de la época soviética y otros creadores rusos contemporáneos.
• Sobre la narrativa no lineal, y el riesgo que conlleva abrazarla, ¿qué crees que aporta a ‘The Execution’ esa estructura episódica con múltiples saltos a lo largo de distintas décadas?
Cuando Olga Gorodetskaya (coguionista del filme) y yo trabajabamos en el concepto inicial de la historia, teníamos muy claro que la estructura del guion no debía ser lineal. Esto nos abría la posibilidad de crear un puzzle cuyas piezas el espectador pueda tratar de reconstruir a lo largo del metraje. Esas piezas contienen matices sobre los personajes y versiones distintas de los acontecimientos que invitan a la audiencia a implicarse en la investigación de una forma inmersiva, algo que la narración lineal no permite. Tengo que agradecer a los productores que apoyaran desde el principio nuestra visión sobre esta narrativa, pues entendieron muy bien nuestras explicaciones sobre lo que aportaba a la película.